México. El presidente Andrés Manuel López Obrador se despidió de Palacio Nacional, el lugar que fue su hogar y oficina durante los últimos seis años. El lunes 30 de septiembre de 2024, AMLO vivió sus últimos momentos en este histórico recinto, marcando el fin de una era en la política mexicana.
El domingo 29 de septiembre, tras regresar de una gira de trabajo, AMLO durmió por última vez en Palacio Nacional. Al día siguiente, se levantó para encabezar su última conferencia matutina, una tradición que definió su mandato. En esta ocasión especial, no respondió preguntas de los periodistas, sino que ofreció un informe final de apenas 10 minutos. Posteriormente, disfrutó de un desayuno con música y baile, y rifó un reloj entre los reporteros como gesto de agradecimiento.
Uno de los momentos más emotivos fue la develación de su retrato presidencial, que se unió a los de sus predecesores en el corredor principal de Palacio Nacional. Este acto simbólico no solo marcó el cierre de su mandato, sino también su permanencia en la memoria política de México.
Tras entregar la banda presidencial a Claudia Sheinbaum el 1 de octubre de 2024, AMLO se retiró a la tranquilidad de su hogar en Palenque, Chiapas. A diferencia de otros expresidentes, decidió alejarse de la vida política y pública, dedicándose a la investigación y la escritura. Aunque inicialmente planeaba trasladarse de inmediato, reveló que permanecería unos días más en la Ciudad de México antes de mudarse definitivamente.
El retiro de AMLO marcó el fin de un capítulo significativo en la historia de México. Su legado de servicio y compromiso con el país quedó grabado en la memoria de todos los mexicanos, mientras él se embarcaba en una nueva etapa de su vida, lejos del bullicio de la política y cerca de la serenidad de Palenque.